martes, junio 19, 2007

Premio Relatos del Café



Noticia literaria

Charo gana el Concurso de Relatos del Café del foro esta semana


Hace unas semanas que nuestros foreros crearon un concurso de relatos. Se trata de un concurso de Relatos Hiperbreves bajo el título Relatos del Café, que podéis encontrar en el subforo Cuando las musas toman café... que se celebrará cada semana y en el que puede participar todo miembro del Foro que lo desee.

La ganadora de esta semana ha sido la forera Charo, que bajo el tema "emigrante" ha logrado un hermoso y tierno relato. Las votaciones esta semana han sido muy duras, incluso ha habido una segunda ronda de desempate, aunque finalmente Charo se ha alzado con el triunfo.

Aquí tienen el magnífico relato:

Subir al tren fue más fácil de lo que pensaba. Iba de la mano de mi madre y ella me daba la seguridad necesaria. Eran las diez de la noche aproximadamente cuando se puso en marcha y me llevó a través de un sueño por campos oscuros y verdes olivos que dormitaban también a nuestro paso. Íbamos en un vagón, mi madre, mis hermanos y yo, con los ojos abiertos como platos, con las orejas atentas a todo y con el chuc-chuc metido hasta las entrañas. Era un tren viejo, de madera, barato y atestado hasta los pasillos de maletas de cartón y fardos humanos. El consabido "¿Falta mucho?" para recibir el consecuente"No, ya llegamos"

Tras veinticuatro horas de viaje, entrar en la gran estación de tren donde nos esperaba nuestro padre, fue la última gran aventura. De los trenes salieron centenares de personas, todas iguales, mujeres con vestidos oscuros y mucha hambre y hombres con chaquetas de pana y mucha ilusión. Alguien dijo a otra persona "emigrants!" en un tono despectivo, pero yo no les entendían porque hablaban otra lengua y me parecía otro país.

Era la noche de Reyes, descubrí al día siguiente cuando en casa de mi tía me regalaron una muñequita que andaba y una habitación donde enjaularnos. Poco después descubrí, también, que el camino que emprendimos aquella noche era sin billete de vuelta. Como tanto cientos, como tanto miles, aunque yo nunca perdí la esperanza de volver a ser chiquita un día y pasear por los barrios en libertad, visitar a mis abuelos, ir al colegio, subir a los pinos y jugar con los chicos de la calle a tirarnos piedras o a cazar cualquier bicho con una escopeta de perdigones.

Estoy segura que volveré a ser pequeñita, me despertaré un día por la mañana en mi casa, en mi cama y nadie me moverá más de allí, ni el hambre, ni el trabajo, ni las miserias. Todos tenemos derecho a una segunda oportunidad.


Noticia: http://www.yoescribo.com/publica/comunidad/noticia.aspx?cod=4291

BANDA SONORA